KINDERNOTHILFE Y KNH EN CHACLACAYO EL 2008 , BUSQUEMOSLOS PARA AYUDAR .
Consecuencias desastrozas para niños y jóvenes
Foto: Julia Burmannn/KNH
(Chaclacayo/ Duisburg, Julio de 2008) En América Latina los explosivos aumentos en los precios de los alimentos y combustibles amenazan los avances en el desarrollo de los últimos años. „Tememos consecuencias desastrozas sobretodo para aquellos niños y jóvenes que ya viven en condiciones de pobreza", declararon los socios de Kindernothilfe y colaboradores de las oficinas KNH en América Latina. Ellos se reunieron a principios de Julio durante una semana en la ciudad peruana de Chaclacayo, para discutir y acordar estrategias de lucha contra la pobreza en América Latina. Los proyectos de desarrollo comunitario tanto rurales como urbanos, promoción de iniciativas de auto-ayuda y un compromiso cada vez más fuerte contra la destrucción ambiental deberán mitigar las consecuencias de la subida de los precios. Hasta fines del año en curso según cálculos de las Naciones Unidas, en América Latina habrán más de diez millones de personas pobres, más que en el año anterior. Con este aumento la cifra de población pobre en Latinoamérica asciende a más de 200 millones, la mitad de ellos son niños y jóvenes. Casi 80 millones de personas en el continente tienen que sobrevivir con un ingreso de menos de un dólar al día.
Los alimentos básicos y los bienes de uso diario y también los costos para la educación y la atención en salud: actualmente todo en América Latina se encarece con una velocidad aterradora. En muchos países del continente, sobretodo en Haití y recientemente en Perú hubo manifestaciones de protesta, porque los pobres ya no saben como alimentar a sus familias. El objetivo del Milenio, reducir hasta el 2015 la cantidad de población pobre a la mitad, corre el riesgo de fracasar en la mayoría de los países. En Chaclacayo, fueron sobretodo las oficinas de KNH en Haití, Honduras, Guatemala y Bolivia quienes informaron sobre el acelerado empeoramiento de las condiciones de vida diaria.
Los directores de organizaciones socias de Kindernothilfe y de oficinas KNH de Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador, Haiti, Honduras, Guatemala y Perú se reunieron en un encuentro sobre estrategias y planificación de séis días en la localidad peruana de Chaclacayo, al este de Lima. Trabajaron en conceptos y propuestas para fortalecer procesos de desarrollo comunitario y de auto-ayuda con las niñas y niños en el foco de la atención y para enfrentar más efectiva y decisivamente las violaciones a los Derechos del Niño en América Latina.
Desde la perspectiva de los participantes del encuentro, para reducir la pobreza en América Latina y para mejorar la calidad de vida de niñas, niños y jóvenes, la lucha contra la destrucción desenfrenada de los recursos naturales y la tala indiscriminada de los bosques juega un rol muy central. „El contexto entre nueva pobreza y destrucción de perspectivas de vida de millones de niños a causa de los daños ambientales y los cambios climáticos irreversibles causados por el hombre, constituye sobretodo en América Latina un gigantesco desafío para el trabajo de Kindernothilfe", manifestó en Chaclacayo el miembro del Directorio y encargado para el trabajo en el exterior de Kindernothilfe, Dietmar Roller, y agregó que „la lucha contra la pobreza, un decidido cambio de mentalidad frente a las amnazas ecológicas y el compromiso con los derechos del Niño están vinculados inseparablemente!"
Un rol fundamental durante la reunión de Chaclacayo lo tuvieron los encuentros con niños y jóvenes de Perú. Durante un día las niñas y niños de la red PRONATS, quienes son apoyados por KNH y su socio IFEJANT a través de un extraordinario y exitoso programa de microcréditos para niñas, niños y jóvenes trabajadores, fueron los anfitriones de los conferencistas de ocho países. También los jóvenes del proyecto de desarrollo urbano Aynimundo acogieron al grupo. Provienen del sector de Pampas de San Juan en el sur de Lima y luchan con compromiso y creatividad junto a los colaboradores del socio de Kindernothilfe Aynimundo contra la violencia, la falta de perspectivas y la discriminación de jóvenes que viven en condiciones de extrema pobreza. En forma especial impresionaron tres jóvenes quinceañeros de la ciudad minera y de la fundición La Oroya, considerada uno de los diez lugares más contaminados del mundo. En un llamado conmovedor exigió María (15) a los socios de Kindernothilfe en Latinoamérica, el apoyo para ellos y sus amigos de la red „Filomena Tomaira Pacsi" en su lucha contra el envenenamiento con plomo y metales pesados que sufren los niños en La Oroya: „sabemos, que todos nosotros ya tenemos entre diez y veinte veces más plomo en la sangre que lo que normalmente puede soportar un hombre. Pero no nos resignamos, sino que luchamos por todos los niños de La Oroya, también por los que todavía no han nacido y que tienen como todos los niños de este mundo, el derecho a la vida!"